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Elección de productos seguros para bebés: Corralitos

Revisor médico: Kate M. Cronan, MD

Estas áreas de juego provistas de laterales altos son populares porque permiten que los padres coloquen a sus bebés en su interior con la seguridad de que no podrán salir. Sin embargo, los corralitos nunca deben sustituir a la supervisión por parte de un adulto; no deje nunca a un niño solo dentro de un corralito.

En qué fijarse:

  • Compruebe que el parque cuente con una certificación de la Asociación de Fabricantes de Productos para Jóvenes (JPMA, por sus siglas en inglés), lo que significa que cumple con los requisitos de seguridad de la Comisión para la Seguridad de los Productos de Consumo (CPSC, por sus siglas en inglés).
  • Los laterales deben tener por lo menos 20 pulgadas (51 centímetros) de altura, desde el suelo hasta la parte más alta del corralito.
  • Si el corralito tiene laterales de malla, los agujeros no deben ser mayores a ¼ de pulgada (0,6 centímetros), para que en ellos no se puedan quedar enganchado los dedos o los botones de la ropa del niño. La malla debe estar agarrada con seguridad, y se debe revisar regularmente en busca de roturas o desgarros.
  • Si el corralito está fabricado con madera, los espacios entre las barras no deben superar las 2 pulgadas con 3/8 (5,08 centímetros).
  • Asegúrese de que las partes altas de la baranda del corralito estén acolchadas para proteger a su bebé de los golpes.
  • Coloque una colchoneta firme y estable, de 1 pulgada (2,5 cm) en el fondo del corralito.
  • Los dispositivos de cierre que permiten bajar un lateral del corralito deben estar fuera del alcance del bebé.
  • Asegúrese de que el corralito cuente con bisagras y anclajes que estén bien protegidos.
  • Busque un corralito con barandas superiores que se bloquean automáticamente cuando se dejen en la posición normal.
  • Si va a usar un corralito de segunda mano, examine bien el fondo para comprobar que no esté dañado.

ADVERTENCIAS DE SEGURIDAD:

  • No deje nunca a un bebé en un corralito de maya con el lateral bajado. El bebé podría quedar atrapado entre la malla y el suelo. Puesto que los bebés corren el riesgo de asfixia, coloque solo una colchoneta en el interior del corralito.
  • No utilice ropa de cama almohadillada ni almohadas dentro del corralito.
  • No cambie la colchoneta original del corralito, porque podría no encajar bien.
  • Supervise todas las partes acolchadas con regularidad para comprobar posibles desgarros; cubra o repare los desgarros o roturas.
  • Muestre a las personas que vayan a cuidar de su hijo cómo abrir y colocar el corralito y revise las normas de seguridad con ellas.
  • Acueste siempre a su bebé para dormir sobra la espalda (boca arriba).
  • El corralito no se debe colocar cerca de ventanas. El bebé se podría estrangular accidentalmente en las tiras o cordeles de las cortinas o persianas.
  • No utilice un corralito que le hayan pasado con aberturas grandes en forma de rombo, ya que la cabeza del bebé podría quedar atrapada en los agujeros.
  • No ate nunca juguetes con cintas o cordeles en los laterales del parque infantil.
  • Deje de usar el corralito cuando su hijo alcance una edad en que podría traspasar los laterales del corralito con facilidad; generalmente cuando el niño mida unas 34 pulgadas (86 centímetros) o pese 30 libras (14 kg).
Revisor médico: Kate M. Cronan, MD
Fecha de revisión: enero de 2018