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Mal aliento

Revisor médico: Steven Dowshen, MD

(Bad Breath)

Por la cara que pone tu amigo al acercarte para decirle algo al oído, te das cuenta que pasa algo raro. ¿Es posible que sea tu aliento? Quizás no deberías haber puesto tanta cebolla en la hamburguesa que comiste en el almuerzo. ¿Qué puede hacer un niño si tiene mal aliento?

La buena noticia es que el mal aliento es algo normal que le ocurre a una persona de vez en cuando. Veamos cómo detectarlo, evitarlo y tratarlo.

¿Qué es ese olor?

El mal aliento es el nombre común que se le da a la afección médica conocida con el nombre halitosis. Muchas cosas pueden causar halitosis —desde no cepillarse los dientes hasta la existencia de ciertas afecciones médicas.

A veces, el mal aliento de un amigo puede mantenerte alejado de esa persona —y es posible que la persona con mal aliento ni tan siquiera se dé cuenta del problema. Hay muchas maneras de decirle a una persona que tiene mal aliento sin ser ofensivo. Le puedes ofrecer una menta o goma de mascar sin azúcar y no tener que decir nada.

Si tienes que decirle a un amigo que tiene mal aliento, puedes comentarle que entiendes que ciertos alimentos pueden causar mal aliento ya que también te ha pasado a ti. Al decirle a tu amigo que el mal aliento no es algo inusual, harás que se sienta más cómodo y menos avergonzado para aceptar la goma de mascar que le ofreces.

Si sospechas de que tu propio aliento tiene mal olor, pregúntale a alguien que te pueda dar una respuesta sincera sin reírte de ti. (No le preguntes a tus hermanos —¡es posible que te digan que tienes muy mal aliento aunque no sea verdad!)

Todos hemos tenido mal aliento en algún momento, pero si tú tienes mal aliento continuamente, debes consultar a un dentista o un médico.

¿Cuál es la causa del mal aliento?

Las causas más comunes de mal aliento son las siguientes:

  1. alimentos o bebidas, como el ajo, las cebollas, el queso, el jugo de naranja y las gaseosas
  2. poca higiene dental (falta de cepillado y de uso de hilo dental de manera regular)
  3. fumar o usar tabaco

La falta de higiene oral produce mal aliento dado que los restos de alimentos que quedan en la boca se pudren y comienzan a largar olor. Las partículas de comida que quedan en la boca comienzan a recoger bacteria, lo cual también produce olor.

Si no te cepillas los dientes con regularidad, comenzarás a juntar sarro (una sustancia incolora y pegajosa que se adhiere a los dientes). El sarro es el lugar ideal para el crecimiento de la bacteria y la producción de mal olor.

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Cómo evitar el mal aliento

Entonces, ¿qué puede hacer un niño? Por supuesto, no fumes o uses tabaco. Y cuídate los dientes cepillándote regularmente por lo menos dos veces al día y pasándote hilo dental una vez por día. Cepíllate la lengua ya que la bacteria también puede crecer allí. Usa hilo dental una vez por día para eliminar trozos de comida entre los dientes. También, ve al dentista dos veces por año para que te hagan un control y para recibir tratamientos de limpieza.

Durante el tratamiento de limpieza, no solamente te limpiarán los dientes sino que mirarán el resto de tus dientes con el fin de detectar posibles problemas, incluyendo aquellos que podrían provocar el mal aliento. Por ejemplo, un problema con las encías, también denominado periodontitis, puede causar mal aliento y dañar tus dientes.

Si te preocupa el mal aliento, díselo a tu médico o al dentista. Pero que no te sorprenda si el dentista se te acerca para olerte. Esta es una de las maneras que tiene el dentista de saber cuál es la causa de tu problema. El tipo de olor que sale de la boca de una persona es una indicación del tipo de problema. Por ejemplo, si alguien tiene una diabetes que no está bajo control, su aliento tendrá olor a acetona (lo que se usa para quitar el esmalte de las uñas).

Si tienes mal aliento todo el tiempo y el dentista no puede determinar el origen del problema, te enviarán a un médico para asegurarse de que no haya una afección médica que lo esté causando. A veces los problemas con los senos paranasales, y en raras ocasiones problemas de hígado o los riñones, pueden causar mal aliento.

Por lo general, el origen del mal aliento es algo simple, como por ejemplo lo que comiste durante el almuerzo. Por lo tanto, sigue cepillándote los dientes y pasándote hilo dental para mantener tu boca fresca y sin olor.

Revisor médico: Steven Dowshen, MD