Aunque prestes atención en clase, estudies para las evaluaciones y hagas los deberes, algunas asignaturas tal vez te resulten demasiado difíciles.  Es posible que tengas la esperanza de que las cosas vayan a mejorar, pero la mayoría de las veces las cosas no ocurren solo porque las desees. 

Lo que les ocurre a muchos estudiantes es que trabajan duro, pero, a pesar de eso, se quedan muy atrás. Se pueden sentir realmente agobiados y superados por lo que les exigen y llegar a pensar en tirar la toalla. 

Si eso es lo que te pasa a ti, no temas pedir ayuda. 

¿Dónde puedo pedir ayuda para hacer los deberes?

Empieza acudiendo a tus profesores o a tu orientador escolar. Algunos maestros trabajan con sus alumnos antes o después de sus clases para explicarles las cosas con más claridad. Tu orientador escolar te puede dirigir a alguna persona de tu escuela para que pueda trabajar contigo. 

Pregunta a un compañero de clase. Si conoces a alguien que sepas que es bueno en una asignatura en concreto, pregúntale si pueden estudiar juntos. De todos modos, ten en cuenta que la gente que entiende bien una materia no siempre es buena explicándola. Considera la posibilidad de preguntárselo a varios compañeros de clase o, incluso, la de montar un grupo de estudio. 

Pregunta a un hermano mayor a un amigo de tu familia. ¿Tienes un hermano mayor que domine la asignatura? ¿O algún amigo de tu familia? ¿Se te ocurre alguien más de tu red social que podría ayudarte? Suele ayudar mucho el hecho de escuchar la misma cosa explicada de maneras diferentes, o sea que analiza si hay alguien más que te lo podría explicar. 

Busca un maestro particular. Los maestros particulares suelen costar dinero, o sea que tendrás que hablarlo antes con tus padres. Tus maestros o tu orientador escolar te podrían ayudar a encontrar un maestro particular si te interesara. Algunos centros de estudios y algunas organizaciones disponen de maestros particulares, o sea que averigua si esa es una opción para ti. 

Busca ayuda gratuita para hacer los deberes en tu zona. En algunas ciudades existen programas gratuitos que se realizan después de las clases en bibliotecas y centros comunitarios, donde maestros particulares voluntarios ayudan a los estudiantes a hacer sus deberes. Haz una búsqueda en línea para saber con qué recursos de este tipo cuenta tu zona de residencia. Tus maestros o tu orientador escolar también te pueden ayudar a encontrar un buen programa. 

Busca ayuda gratuita para hacer los deberes en línea. Hay muchas compañías de clases particulares o clases de apoyo, como Khan Academy o Princeton Review, que ofrecen ayuda gratuita para hacer los deberes en sus sitios web. También puedes encontrar lecciones en línea, responder a cuestionarios y usar otros recursos didácticos de internet. 

Busca vídeos didácticos en línea. Hay muchos maestros particulares que hacen vídeos didácticos y gratuitos en línea donde explican conceptos importantes. Tus profesores tal vez te puedan recomendar a alguno de esos maestros en línea. Es una buena idea que se lo preguntes a ellos para que sepas si los vídeos son fiables y concuerdan con la información que te han explicado en clase.

Por encima de todo, asegúrate de que eres tú quien hace tus deberes. Por mucho que te ayude tu maestro particular, los recursos en línea u otra gente, te debes asegurar de que ellos no están haciendo los deberes por ti. Eso no solo sería copiar y engañar a tus profesores, sino que impediría que aprendieras lo que necesitas saber. Siempre que necesites que te ayuden, asegúrate de que quien te ayuda no te está haciendo los deberes. 

Asegúrate de que la ayuda que recibes te ayuda de verdad

Tal vez te parezca que, aunque un tema tenga sentido cuando alguien te lo explica, luego, cuando tratas de hacer la tarea por ti solo, te vuelve a resultar confusa. O tal vez deje de tener sentido lo que antes entendías bien y estés todavía más confundido que al principio. 

No tires la toalla la primera vez que intentes hacerlo solo. Prueba varias estrategias para ver cuál de ellas te funciona mejor. Ten en cuenta que te puede costar varios intentos hasta que acabes por entender de verdad. Sabrás que estás recibiendo la ayuda que necesitas cuando seas capaz de entender y de hacer las cosas por ti mismo.