Qué deben saber los maestros

El enanismo es un trastorno del crecimiento. El tipo de enanismo más frecuente es la acondroplasia. Típicamente, los adultos con enanismo miden 4 pies con 10 pulgadas (147 cm) o menos. 

La acondroplasia suele suponer que una persona tenga:

• la parte superior de los brazos y las piernas más cortos y el torso relativamente largo
• las manos y sus dedos más cortos de lo normal
• cabeza de mayor tamaño y frente prominente
• nariz en silla de montar

Entre los problemas físicos relacionados con el enanismo, se incluyen los siguientes:

• bajo tono muscular y retraso en el desarrollo de las habilidades motoras
• problemas respiratorios
• curvatura anormal de la columna vertebral, como una escoliosis
• piernas arqueadas
• flexibilidad articular limitada y artritis
• dolor en la zona lumbar o insensibilidad en las piernas
• infecciones de oído recurrentes y riesgo de pérdidas auditivas
• apiñamiento dental

El enanismo no afecta a las capacidades intelectuales. El enanismo no se puede curar, pero la mayoría de la gente pequeña lleva vida largas y plenas. Las personas pequeñas van a la escuela, tiene carreras profesionales, se casan y tienen hijos, igual que cualquier persona de estatura promedio. 

Los alumnos con enanismo pueden:

• necesitar más tiempo para llegar a clase por cuestiones de movilidad
• necesitar más tiempo en los exámenes si en su resolución participa la destreza manual
• perderse tiempo de clase o tareas escolares por las visitas médicas
• necesitar taburetes o escalones para usar el inodoro, fuentes, aulas y similares
• requerir adaptaciones especiales, tanto en la clase como en toda la escuela
• estar ansiosos, deprimidos y avergonzados por su estatura
• exponerse a que se metan con ellos y a ser objeto de acoso escolar o bullying 
• beneficiarse de un programa de educación individualizada (IEP por sus siglas en inglés) o de un plan de educación 504 para satisfacer adecuadamente sus necesidades físicas y educacionales

Qué pueden hacer los maestros

En su clase, usted puede ofrecer un ambiente de aprendizaje acogedor y productivo, haciendo cambios adaptativos donde sea necesario. Los alumnos con enanismo deben ser capaces de alcanzar todo lo que puedan alcanzar sus compañeros de clase. Y recuerde siempre que debe tratar a sus alumnos con enanismo de acuerdo con su edad, no con su tamaño. A menos que un alumno con enanismo tenga un trastorno del aprendizaje, las expectativas educacionales que usted tenga sobre él no deben diferir de las que tenga sobre los demás alumnos. 

Los alumnos con enanismo se pueden ver limitados en los tipos de ejercicios y de actividades que puedan hacer, pero es muy importante que participen en actividades físicas seguras que los ayuden a mantenerse en forma. 

Los alumnos con enanismo se pueden sentir incómodos y avergonzados con respecto a sus compañeros de clase. Si se educa a sí mismo y a sus alumnos sobre el enanismo puede reducir el acoso que reciban los alumnos que lo presentan y aumentar la confianza en sí mismos.